"Dió su vida y está vivo. Para muchos vivirá aún más. Dentro de su cruz, hay tanto dolor como amor. Transformador amor que altera la natural forma de las hojas para convertirlas en esperanzados corazones, multiplicados día tras día. Dos árboles lo acompañan: Ladrones. ÉL, como uno más... La lanza en ÉL. Y no da más... La naturaleza acude con sensibilidad aliviando el dolor y lo sujeta con sus propias ramas en lugar de feroces clavos. Pero ya es tarde... o no. Todo termina...o recién empieza. Una inscripción que desde lo alto pretende humillar: Jesús de Nazareth Rey de los Judíos. En realidad, un árbol que hace 2000 años quisieron talar como se ha talado históricamente a los idealistas. No pudieron y hoy ya es un bosque... Prédicas, parábolas y palabras. Quiso cambiar todo y empezar de cero. En parte lo logró: Antes y después de Cristo. Antes: invasiones, matanzas, barbarie. Intolerancia, incomprensión. Guerras, genocidios e injusticias. Y después... también. No cambió, desafortunadamente, el destino del mundo; pero sí, espiritualmente, al que cree en Él. Y yo creo... "
Feliz Aniversario vida.
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